Neymar pelea un balón contra Sudáfrica
Brasil, que inició el compromiso con un equipo altamente ofensivo con los creativos Lucas y Oscar y los delanteros Neymar y Leandro Damiao, no mostró el fútbol deseado por los exigentes hinchas del estadio Morumbí de Sao Paulo ni el que se espera del equipo que está siendo preparado para disputar en casa el Mundial de 2014.
La selección comandada por el técnico Mano Menezes necesitaba una clara victoria para reconquistar a los hinchas tras haber perdido el oro en los Juegos Olímpicos de Londres, en los que fue derrotada en la final por México, pero tan sólo consiguió imponerse a Sudáfrica con muchas dificultades por la mínima diferencia, con un gol del suplente Hulk, lo que agravó su relación con la afición.
Los abucheos en el estadio Morumbí comenzaron en el primer tiempo de forma tímida y fueron aumentando hasta ser constantes en la segunda etapa.
Además de las críticas a Neymar, a quien los hinchas del Sao Paulo cuestionaron sus seguidas caídas, los aficionados pidieron a gritos la convocatoria del delantero Luiz Fabiano, titular de Brasil en el Mundial de 2010 y que actualmente viene destacando como jugador del club Sao Paulo. Los hinchas comenzaron a impacientarse incluso por los problemas fuera de la cancha. Ello debido a que el partido comenzó con 17 minutos de atraso debido a que el color de las camisetas de las dos selecciones era muy parecido y, como el segundo uniforme de Sudáfrica también lo era, Brasil tuvo que cambiar su tradicional camiseta amarilla por la azul.
La primera oportunidad clara de Brasil se produjo a los 16 minutos, cuando el zaguero Dedé subió más alto que todos los defensas surafricanos y remató con la cabeza un centro desde la derecha que obligó al portero Khune a mostrar sus habilidades.
Pese a que Brasil tuvo un mayor dominio del balón en la primera parte, los sudafricanos llegaron a sorprender y crearon algunas jugadas peligrosas frente a la portería de Diego Alves. Neymar, del que se esperaba una gran actuación, desperdició una gran oportunidad a los 42 minutos tras recibir en el área un lanzamiento de Daniel Alves que estrelló en el portero africano. El pitido que marcó el final del primer tiempo fue seguido por un fuerte abucheo en todo el Morumbí y por una salida apresurada de los jugadores brasileños.
Más abucheos
En el segundo tiempo, pese a los abucheos, Brasil tuvo mejores oportunidades y comenzó a llegar con más peligro a la portería sudafricana, principalmente con Neymar insistiendo para abrir el marcador pero pecando por desperdiciar pases a compañeros que estaban mejor colocados.
Brasil aprovechó que Sudáfrica tuvo que sustituir a dos delanteros en pocos minutos por lesiones para mejorar. Beni McCarthy entró en el lugar del lesionado Dino Ndlovu, pero tuvo que ser sustituido diez minutos después por Bernard Parker igualmente por lesión.
Menezes, en cambio, hizo unas modificaciones que le dieron no sólo oxígeno sino una mejor cara a la selección brasileña, con la entrada del efectivo Hulk, que la semana pasada fue transferido al Zenith de Rusia por un valor récord. Diez minutos después de entrar, Hulk anotó el gol salvador de la selección brasileña, al aprovechar un rebote del portero Khune tras una internada del zaguero David Luiz en un área llena de defensas.
El gol tranquilizó un poco a la selección brasileña, especialmente porque silenció temporalmente los abucheos, pero no fue suficiente para mejorar el fútbol de los cinco veces campeones del mundo. Faltando dos minutos para el final, Menezes sustituyó a Neymar por Arouca y el astro de la selección brasileña tuvo que salir de la cancha escuchando un fuerte abucheo de desaprobación.
LA FICHA DEL PARTIDO:
1. Brasil: Diego Alves; Daniel Alves, Dedé, David Luiz, Marcelo (Alex Sandro, m.59); Rómulo (Paulinho, m.63), Ramires, Oscar, Lucas (Jonas, m.71); Neymar (Arouca, m.89) y Leandro Damiao (Hulk, m.63). Seleccionador: Mano Menezes.
0. Suráfrica: Itumeleng Khune; Siboniso Gaxa, Siyabonga Sangweni, Bongani Khumalo, Punch Masenamela; Kagisho Dikgacoi, Dean Furman (Katlego Mashego, m.58), Siphiwe Tshabalala; Thulani Serero; Dino Ndlovu (Benni McCarthy, m.32) (Bernard Parker, m.43) y Lerato Chabangu (Letsholonyane, m.55). Seleccionador: Gordon Igesund.
Gol: 1-0, m.74: Hulk.
Árbitro: Néstor Pitana (ARG). Mostró tarjeta amarilla a los brasileños Dedé, Marcelo y Hulk, y a los surafricanos Chabangu, Gaxa y Dikgacoi.
Incidencias: Partido amistoso disputado en el estadio Morumbí de la ciudad de Sao Paulo ante 51.000 espectadores. Antes del compromiso fue rendido un homenaje a siete de los jugadores brasileños que conquistaron el Mundial de 1958 en Suecia.
La selección comandada por el técnico Mano Menezes necesitaba una clara victoria para reconquistar a los hinchas tras haber perdido el oro en los Juegos Olímpicos de Londres, en los que fue derrotada en la final por México, pero tan sólo consiguió imponerse a Sudáfrica con muchas dificultades por la mínima diferencia, con un gol del suplente Hulk, lo que agravó su relación con la afición.
Los abucheos en el estadio Morumbí comenzaron en el primer tiempo de forma tímida y fueron aumentando hasta ser constantes en la segunda etapa.
Además de las críticas a Neymar, a quien los hinchas del Sao Paulo cuestionaron sus seguidas caídas, los aficionados pidieron a gritos la convocatoria del delantero Luiz Fabiano, titular de Brasil en el Mundial de 2010 y que actualmente viene destacando como jugador del club Sao Paulo. Los hinchas comenzaron a impacientarse incluso por los problemas fuera de la cancha. Ello debido a que el partido comenzó con 17 minutos de atraso debido a que el color de las camisetas de las dos selecciones era muy parecido y, como el segundo uniforme de Sudáfrica también lo era, Brasil tuvo que cambiar su tradicional camiseta amarilla por la azul.
La primera oportunidad clara de Brasil se produjo a los 16 minutos, cuando el zaguero Dedé subió más alto que todos los defensas surafricanos y remató con la cabeza un centro desde la derecha que obligó al portero Khune a mostrar sus habilidades.
Pese a que Brasil tuvo un mayor dominio del balón en la primera parte, los sudafricanos llegaron a sorprender y crearon algunas jugadas peligrosas frente a la portería de Diego Alves. Neymar, del que se esperaba una gran actuación, desperdició una gran oportunidad a los 42 minutos tras recibir en el área un lanzamiento de Daniel Alves que estrelló en el portero africano. El pitido que marcó el final del primer tiempo fue seguido por un fuerte abucheo en todo el Morumbí y por una salida apresurada de los jugadores brasileños.
Más abucheos
En el segundo tiempo, pese a los abucheos, Brasil tuvo mejores oportunidades y comenzó a llegar con más peligro a la portería sudafricana, principalmente con Neymar insistiendo para abrir el marcador pero pecando por desperdiciar pases a compañeros que estaban mejor colocados.
Brasil aprovechó que Sudáfrica tuvo que sustituir a dos delanteros en pocos minutos por lesiones para mejorar. Beni McCarthy entró en el lugar del lesionado Dino Ndlovu, pero tuvo que ser sustituido diez minutos después por Bernard Parker igualmente por lesión.
Menezes, en cambio, hizo unas modificaciones que le dieron no sólo oxígeno sino una mejor cara a la selección brasileña, con la entrada del efectivo Hulk, que la semana pasada fue transferido al Zenith de Rusia por un valor récord. Diez minutos después de entrar, Hulk anotó el gol salvador de la selección brasileña, al aprovechar un rebote del portero Khune tras una internada del zaguero David Luiz en un área llena de defensas.
El gol tranquilizó un poco a la selección brasileña, especialmente porque silenció temporalmente los abucheos, pero no fue suficiente para mejorar el fútbol de los cinco veces campeones del mundo. Faltando dos minutos para el final, Menezes sustituyó a Neymar por Arouca y el astro de la selección brasileña tuvo que salir de la cancha escuchando un fuerte abucheo de desaprobación.
LA FICHA DEL PARTIDO:
1. Brasil: Diego Alves; Daniel Alves, Dedé, David Luiz, Marcelo (Alex Sandro, m.59); Rómulo (Paulinho, m.63), Ramires, Oscar, Lucas (Jonas, m.71); Neymar (Arouca, m.89) y Leandro Damiao (Hulk, m.63). Seleccionador: Mano Menezes.
0. Suráfrica: Itumeleng Khune; Siboniso Gaxa, Siyabonga Sangweni, Bongani Khumalo, Punch Masenamela; Kagisho Dikgacoi, Dean Furman (Katlego Mashego, m.58), Siphiwe Tshabalala; Thulani Serero; Dino Ndlovu (Benni McCarthy, m.32) (Bernard Parker, m.43) y Lerato Chabangu (Letsholonyane, m.55). Seleccionador: Gordon Igesund.
Gol: 1-0, m.74: Hulk.
Árbitro: Néstor Pitana (ARG). Mostró tarjeta amarilla a los brasileños Dedé, Marcelo y Hulk, y a los surafricanos Chabangu, Gaxa y Dikgacoi.
Incidencias: Partido amistoso disputado en el estadio Morumbí de la ciudad de Sao Paulo ante 51.000 espectadores. Antes del compromiso fue rendido un homenaje a siete de los jugadores brasileños que conquistaron el Mundial de 1958 en Suecia.