El relanzamiento que se lleva a cabo de las Cumbres Iberoamericanas responde a una visión pragmática de la realidad actual, en la que existen múltiples mecanismos de cooperación y diálogo regional, según dijo en entrevista con la prensa el canciller chileno,Heraldo Muñoz.
"La reinvención de las Cumbres que se va a producir ahora es una visión pragmática de lo que hay que hacer en adelante", señaló Muñoz.
A 23 años de la primera cita de jefes de Estado y de Gobierno de los 22 países que integran la Organización de Estados Iberoamericanos, celebrada en 1991 en la ciudad mexicana de Guadalajara, Chile piensa que de ningún modo se puede hablar de fracaso.
"Ayudaron a establecer un puente entre América Latina y Europa. El diálogo que hay hoy entre la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe) y la Unión Europea tiene como precedente las Cumbres Iberoamericanas", afirmó Muñoz.
"Lo que ha habido -dijo- ha sido una adaptación a las nuevas circunstancias, porque el mundo cambió y hoy día hay una situación de estancamiento en América Latina y Europa, al tiempo que han surgido otros referentes, como los BRICS", las economías emergentes de Brasil,Rusia, India, China y Sudáfrica.
No obstante, el canciller chileno reconoció que la crisis en Europa, y especialmente en España y Portugal, ha afectado a la relevancia de las Cumbres Iberoamericanas.
"Indudablemente que la crisis en España y ahora en América Latina afecta al empuje, pero creo que todavía hay voluntad política de avanzar de manera mucho más pragmática", reconoció Muñoz.
A juicio del responsable de exteriores de Chile, "las Cumbres Iberoamericanas no son una instancia de concertación política, sino que deben reorientarse hacia una concertación multilateral en materias sectoriales, de mayor impulso a la gobernabilidad democrática y un espacio concreto de cooperación".
Por ello le parece que "está muy bien elegido" el tema de la XXXIV Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, que se celebrará el martes y el miércoles de la próxima semana en la ciudad mexicana de Veracruz.
"El tema de la educación, la cultura y la innovación es la clave para la competitividad futura de todos los países" que integran la Organización de Estados Iberoamericanos, subrayó.
"El principal desafío que tiene hoy América Latina es reducir la desigualdad" y por eso "es muy importante intercambiar experiencias con España y Portugal y aprender de los aciertos y errores".
El jefe de la diplomacia chilena también comentó el proceso de acercamiento entre la Alianza del Pacífico y el Mercosur, que tuvo un hito importante con un seminario de alto nivel celebrado a comienzos de la semana pasada en Santiago.
"El primer logro ya se ha obtenido, y es juntar a los cancilleres y a los ministros de Comercio de ambos bloques y dar una señal de búsqueda de acuerdos graduales, pragmáticos y complementarios y sin ambiciones desmedidas", aseguró Heraldo Muñoz.
El objetivo es "lograr una concertación que beneficie a ambos bloques sin desnaturalizar la especificidad de cada uno y sin pretender una fusión, porque eso no sería realista", añadió el canciller.
"Si Chile aspira a ser un país puerto hacia la región del Asia Pacífico, tenemos que hacerlo con nuestros vecinos del Atlántico. Chile por lo menos tiene muy claro que tenemos que avanzar", enfatizó Muñoz.
El ministro chileno de Relaciones Exteriores sostuvo que "en los temas globales, América Latina debe actuar como una sola región", pero al mis tiempo considera "la idea de las dos velocidades, que surgió en Europa, es muy útil para visualizar la relación entre la Alianza del Pacífico y el Mercosur".
Por otro lado, Heraldo Muñoz elogió la iniciativa del secretario general de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), Ernesto Samper, de impulsar una cédula de identidad sudamericana.
"Es un elemento adicional de apertura de fronteras e integración", dijo.
Y también destacó el cambio de actitud hacia América Latina que se observa en el Fondo Monetario Internacional (FMI), que hoy y mañana celebra una reunión de alto nivel en Santiago a la que asiste su directora gerente, Christine Lagarde, entre otras personalidades.
"De un tiempo a esta parte hemos recibido señales muy interesantes por parte del FMI (...), nos causa una grata impresión que la señora Lagarde diga que las reformas estructurales que se están implementando en Chile son fundamentales porque apuntan a los cambios sociales que se necesitan", concluyó el ministro.