La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, recibió una propuesta orientada a lograr un desarrollo sostenible de la minería, motor de crecimiento de la economía del país, de manos de un grupo encabezado por el exmandatario Ricardo Lagos.
Tras una reunión privada en el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo, el expresidente Lagos (2000-2006), quien participó en la elaboración de la propuesta, dijo que el objetivo es promover un estilo de desarrollo minero sostenible e inclusivo.
“No pretendemos refundar nada con este documento, simplemente es entregarlo para la discusión de todos”, agregó.
Por su parte, la ministra de Minería, Aurora Williams, resaltó la iniciativa y aseguró que “ahora comienza el análisis” para “poder efectivamente llevarlo a concreción en ámbitos donde prácticamente tenemos coincidencias”.
El informe, en cuya elaboración intervinieron economistas, empresarios y trabajadores del sector minero, plantea que el foco de la estrategia de desarrollo debe estar en proveedores intensivos de conocimiento.
Asimismo, destaca la importancia de contar con una política energética que dé seguridad a los inversionistas y ciudadanos, que se haga cargo de la interdependencia entre la minería y la generación y transmisión eléctrica, así como del impacto de estas en su entorno ambiental, social y cultural.
Sobre Codelco, la mayor firma estatal chilena y principal productora de cobre del mundo, el estudio destaca su rol “como empresa modelo de desarrollo virtuoso, sostenible e inclusivo”.
También plantea que la minería debe proyectarse a futuro con una mirada sostenible, que “previene y mitiga los impactos ambientales sociales y culturales”.
Para lograr este objetivo propone cambios institucionales, como el uso de la evaluación ambiental estratégica como instrumento de ordenamiento territorial; al igual que fortalecer y anticipar los procesos de participación de las comunidades afectadas por minería, proveyendo información fidedigna, suficiente y comprensible.
Adicionalmente, se plantea contar con una adecuada reglamentación de consulta libre, previa e informada a los pueblos indígenas y crear un fondo que permita habilitar a las organizaciones sociales y comunidades para que participen en igualdad de condiciones en esos procesos.
Un tercer aspecto que se toca es que la minería se desarrolle como una actividad inclusiva, que haga partícipe de los beneficios que genera a su entorno y toda la ciudadanía.
Como medida concreta se postula que una parte de los ingresos públicos que se generen los proyectos mineros, por ejemplo a través de los impuestos, queden en las regiones donde estos se ejecuten.
