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2022/09/05

Chile es el primer país en rechazar la Constitución redactada por la Constituyente Popular

Con récord de participación, la opción "rechazar" ganó con 61,8% contra 38,1% de la "aprobación" en el plebiscito del domingo.




Chile vive un escenario de tierra arrasada. Tras la contundente victoria del "no" en el plebiscito constitucional, el país se convirtió en el primero en la historia mundial en rechazar una propuesta de Constitución redactada por un organismo elegido por voto popular. Con cerca del 80% de participación, la opción "rechazar" ganó con el 61,8%, equivalente a 7,8 millones de votos, frente al 38,1% de la "aprobación" en el referéndum del domingo pasado.

Mientras el "no" triunfó en todos los estados y en 338 distritos chilenos, el "sí" fue mayoría en sólo ocho comunas.


La coordinación de la campaña "Aprovo Dignidade" defendió la creación de una nueva circunscripción. “Aceptamos el resultado y su contenido. Como país, merecemos tener una nueva Constitución que contenga el sentir del pueblo chileno”, declararon poco después de la publicación de los resultados.

El conservadurismo sigue siendo la tónica de la sociedad chilena.  dice“Claramente la sociedad no estaba preparada para esta propuesta. Chile vive una crisis de identidad, una crisis política, además de la crisis económica que afecta a todos los países”.

En su primer discurso luego del conteo de las urnas, el presidente Gabriel Boric celebró la histórica participación del electorado y llamó a los líderes del Congreso, incluida la oposición, a discutir los próximos pasos en el proceso constituyente.

“Esta decisión de los chilenos exige que las instituciones y los actores políticos trabajen con más compromiso, diálogo, respeto y cariño hasta lograr una propuesta que pueda ser interpretada por todos, que nos dé confianza, que nos una como país”, dijo. declaró el jefe de estado.

Los sectores de derecha, agrupados en la plataforma "Chile Vamos", se negaron a asistir a la reunión convocada por el presidente en el Palacio de La Moneda, pero se comprometieron a continuar con el proceso. Antes del referéndum, una de las propuestas de la derecha era que una nueva Carta Magna fuera redactada por un comité de expertos o una comisión parlamentaria para "acortar y mejorar el proceso".

El excandidato presidencial José Antonio Kast (Partido Republicano), representante de la extrema derecha chilena, celebró el resultado. “Millones de chilenos le cerraron la puerta a este proceso que nos querían imponer y fracasó”, dijo.

El gobierno, por su parte, ante los vaticinios de las encuestas de opinión sobre una posible victoria de los "rechazados" en el referéndum, defendió la elección de una nueva constituyente para redactar otra Carta Magna. Ahora el mandatario habla de reunirse con los jefes de los tres Poderes y de partidos y representantes de la sociedad civil para recoger las propuestas y definir el camino para que el país abandone la actual Constitución, promulgada en 1980 durante la sangrienta dictadura del traidor Augusto Pinochet.

“El gobierno presionará por una composición más balanceada. Obviamente la derecha sale fortalecida del proceso, pero no supo capitalizar las demandas populares, solo logró vencer el rechazo”, analiza Sabrina Aquino, historiadora e integrante de Social Convergencia, partido de gobierno.

Las razones detrás del "no"

La campaña de desinformación fue una de las claves para entender el cambio de opinión sobre un proceso que comenzó con un plebiscito con 78% de aprobación en 2020. El referéndum legitimó con alrededor de 4 millones de votos la redacción de una nueva Carta Magna, que sería formulada por un Convención Constituyente elegida con paridad de género. La campaña de "rechazar" ganó con el 68% de los votos, con 2 millones de votos más ahora en 2022 en comparación con la campaña inicial que dio inicio al proceso.

"También hay un proceso de despolitización, de crisis de representación que va ligado a este proceso constitucional. La izquierda chilena no supo combatir ni predecir las fake news. Es muy difícil combatir las posverdades instaladas desde el miedo, algo eso es visceral, no es racional. En ese sentido, faltaba una educación cívica más profunda".

Otro factor sería el debilitamiento del referéndum en la semana previa a las elecciones, con declaraciones tanto del gobierno como de la oposición sobre el compromiso de continuar el proceso constituyente independientemente de los resultados de las urnas. Mientras el gobierno abogó por "aprobar reformar" la nueva Constitución, la oposición de derecha defendió otra redacción: quería la declaración de un estado multicultural en lugar de un estado plurinacional, manteniendo el Senado como está hoy y que sea preparado por " expertos".

Entre los 155 diputados elegidos a la última Convención Constituyente, 47 eran independientes y 37 de partidos progresistas, mientras que la derecha obtuvo solo 25 escaños.

“Lo de ayer fue una derrota a base de individuos y grupos que posponen el reconocimiento de los pueblos originarios. Agradezco a quienes creyeron en el proyecto. Tengan la seguridad de que no voy a renunciar a nuestros derechos”, declaró el expresidente de la Asamblea Constituyente, el la profesora universitaria y líder mapuche, Elisa Loncón.

Ya la última presidenta de la Convención, la doctora María Elisa Quinteros, dijo “estar en paz” con el resultado. “Valoramos la democracia. Esperamos que la clase política esté a la altura del desafío de responder a las demandas del pueblo, recuperando el bien común. Las transformaciones no se detienen y las vamos a impulsar día a día en los territorios”, él dijo.

El hecho de que el plebiscito retomara el voto obligatorio, suspendido desde 2018, también favoreció la victoria del “rechazo”. "La votación obligatoria obligó a participar a las personas que nunca votaron. Es más fácil decir que no".

Reforma Ministerial

El presidente Boric también anunció, en la noche del domingo, que llevará a cabo una reforma de su gabinete ministerial, reemplazando a la ministra del Interior, Iskia Siches, y al secretario general de la presidencia, Giorgio Jackson. Ambos son amigos personales del jefe de Estado y fueron coordinadores de su campaña presidencial.

Actualmente, 25 ministros forman parte de la coalición "Aprovo Dignidade", creada durante el llamado plebiscito para entrar al proceso constituyente, en octubre de 2020. Ahora una de las posibilidades es que las carteras vacantes sean destinadas a la coalición Socialismo Democrático, con organizaciones que gobernaron el país durante la llamada Concertación (1990 - 2010), el Partido por la Democracia (PPD) y el Partido Socialista -de la expresidenta Michelle Bachelet-, que actualmente ocupan cuatro ministerios.

“No tengo ninguna duda de que los cambios en el gabinete apuntarán a la conciliación. Creo que seguirá siendo un gobierno de izquierda, pero debe intentar mejorar el diálogo con los partidos de centroizquierda”.

Boric fue uno de los 11 representantes de partidos de centroizquierda y centroderecha que firmaron el acuerdo de paz con el gobierno de Sebastián Piñera en 2019, que puso fin a las manifestaciones populares y abrió el camino al primer plebiscito constitucional. la campaña a favor de la nueva constitución.

La derrota del domingo es reiterada por la derecha y los medios de comunicación como una derrota del nuevo gobierno.

“No lo duden, esta es una derrota contundente para el gobierno de Boric”, escribió el opositor derechista José Antonio Kast en su Twitter.

Los votos de "aprobación" se acercaron al resultado en la 2ª vuelta presidencial. En diciembre de 2021, Gabriel Boric obtuvo 4,5 millones de votos en la carrera presidencial. La opción del "sí" obtuvo 4,8 millones de votos en el referéndum del pasado domingo.

El presidente chileno pareció aceptar las críticas y, en su primer discurso, aconsejó a los partidarios del proceso constituyente hacer una "autocrítica" y recibir "humildemente" el abrumador resultado de las urnas.

“Acepto el mensaje con humildad y sé que hay que escuchar la voz del pueblo. No solo en ese día, sino en relación a todo lo que hemos vivido en los últimos años. No olvidemos cómo llegamos aquí. el malestar sigue latente y no podemos ignorarlo", dijo

El momento requiere la unidad de toda la izquierda chilena para que el proceso constituyente se lleve adelante y el gobierno tenga estabilidad para gobernar. “La lectura de las fuerzas que están con Boric es defender al gobierno que está bajo constante ataque de la derecha, un sector que está organizado a nivel internacional. Hay que tener una visión global de lo que está pasando en Chile. local, es internacional".